domingo, 10 de junio de 2012

"Por cuanto te llame, y no quisiste escuchar, extendí mi mano y no hubo quien la cogiera, si no que desechaste todo consejo mío, y me represión no quisiste. También me reír en tu calamidad, y me burlare cuando venga a lo que le temes, cuando venga como una destrucción a lo que temes, y tu calamidad llegará como un torbellino, cuando sobre ti venga tribulación y angustia; entonces me llamarán y no responderé, me buscarán de mañana y no me encontraran.."

Prov 1 - 2; 24-29